La primera reunión presencial de los mandatarios de México, Estados Unidos y Canadá, Andrés Manuel López Obrador, Joe Biden y Justin Trudeau, se celebró este jueves en la Casa Blanca luego de reuniones bilaterales más temprano.

El objetivo de las conversaciones fue encontrar un terreno común entre los tres vecinos unidos por el acuerdo de libre comercio entre Estados Unidos, México y Canadá (T-MEC), que influye en unos 1.5 billones de dólares anuales de comercio norteamericano.

“Nuestra visión norteamericana para el futuro se basa en nuestras fortalezas compartidas”, dijo Biden, sentado en una mesa larga que permitió a los tres líderes mantener distancia de acuerdo con el protocolo Covid-19.

“Tenemos que poner fin a la pandemia y tomar medidas decisivas para frenar la crisis climática. Tenemos que impulsar una recuperación económica inclusiva”, añadió. “Tenemos que manejar el desafío de una migración sin precedentes en nuestro hemisferio”.

La reunión se derivó de un impulso de Biden para revivir a los llamados “Tres Amigos”, un grupo de trabajo abandonado por su predecesor Donald Trump.

El restablecimiento de los lazos con México y Canadá también forma parte del esfuerzo de Biden por pasar página a la era de Trump, alejándose del estridente enfoque individual de su predecesor para adoptar un estilo más colaborativo.

En su reunión cara a cara con Biden, López Obrador agradeció al mandatario estadounidense por las propuestas que podrían mejorar el estado de migrantes de mucho tiempo en Estados Unidos e instó a los legisladores estadounidenses a respaldar tal medida. Pero el destino de cualquier iniciativa de inmigración de Biden sigue siendo incierto en el Congreso.

“Estoy seguro de que ambos estamos comprometidos para que la democracia realmente ayude a nuestros pueblos. La democracia en los últimos 20 años se ha visto reducida, son menos”, dijo Biden en declaraciones a la prensa en la Casa Blanca al inicio de su primera reunión en persona con López Obrador.

Durante la reunión trilateral, López Obrador dijo que la integración económica sería la mejor manera de enfrentar “la expansión productiva y comercial de China”. Alertó que podrían encaminarse hacia una “desproporción inaceptable” en el terreno económico que “mantendría viva la tentación de apostar a resolver esa disparidad con el uso de la fuerza”.

“¿Por qué no podemos producir en América del Norte lo que consumimos? Claro que sí. Es asunto de definición y de estrategia económica regional”, planteó el presidente mexicano.

“Esto pasa por planear conjuntamente nuestro desarrollo y por impulsar un programa de inversión productiva en América del Norte para la sustitución de importaciones”.

Por su parte, más tarde, el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, confió este jueves en que su alianza con su homólogo de México, Andrés Manuel López Obrador, demuestre que “las democracias pueden funcionar”, ante el auge de modelos autocráticos como el chino.

AMLO aboga por migrantes

También en el encuentro trilateral, el presidente López Obrador pidió a Estados Unidos que apueste por “dejar de rechazar a migrantes”, porque los necesita para su crecimiento económico, una solicitud que extendió también a Canadá.

“¿Por qué no estudiar la demanda de mano de obra y abrir ordenadamente el flujo migratorio?”, planteó López Obrador.